~ Arte ~

Exterior

~ La Torre

Es lo primero que se comienza a construir de la iglesia. A ella se accede por un hisillo con tres saeteras; es cuadrangular y maciza, construida con piedra de Hurones, pensada también como elemento defensivo. Podemos notar cuatro cuerpos separados por vierteaguas, con ventanales, unos sencillos y otros grandes y esbeltos, cuya ojiva está protegida con el parteluz.

Su bóveda no estaba acabada; actualmente no hay restos de la misma. Las intervenciones habidas en el último tercio de este siglo en su cubierta la han dotado de una estructura firme de ladrillo con hierro.
la veleta es del año 1797, costó 900 reales, que fue colocada después de que ese mismo año se arreglase la torre, haciendo un nuevo chapitel, por la que se llegan a pagar más de 6000 reales.

El año 1716 se hacen sus cuatro troneras para colocar las dos campanas y los dos campanillos. para entonces, ya existía alguna campana. A partir de estas troneras la esbelta torre lucirá sus campanas y esquilones; su utilización frecuente hará que las mismas se vayan fundiendo y renovando con cierta frecuencia.
Actualmente, las campanas y los esquilones están electrificados.

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~ Arco de entrada

Tiene un gran arco abocinado, decorado por cinco series de arquivoltas que cobijan un excelente tímpano esculpido, sostenido por el arco adintelado, y sobre los escudos de D. Miguel Estébanez de Huerto del Rey, cuyo sepulcro se halla en la catedral burgense, junto a su esposa, Ucenda.

En 1789 se compone la puerta principal de la iglesia; con este motivo, en la misma partida de la obra se deja constacia de la "pintura al óleo y dorado del arco de dicha puerta", que con la pintura y dorado "del enrejado mayor del hierro de la expresada iglesia", abona su fábrica 1500 reales.
La representación juega con seis fiuras bien dispuestas en el espacio timpaneal.

Está la figura de Jesucristo, sentado en trono; tiene en su mano izquierda la bola del mundo, y con la derecha está coronando a su Madre. Enfrente, también descansando sobre trono, está la Virgen, que en actitud orante y con inclinación de cabeza, acepta este honor.
Presenciando el triunfo de María están los apóstoles Pedro (al lado de María) y Juan (al lado de Cristo); sus rodillas están dobladas y sus manos juntas. uniéndose también al acto de la Coronación se hallan dos ángeles, uno de ellos con el incensario. y en el vértice del mismo tímpano está colocado el escudo real de Castilla y León, seguramente como homenaje a la Corona, a la que tanto debe este templo.

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~ Puerta de la iglesia

Hay que reseñar, que el edificio más destacado del antiguo pueblo de Gamonal, incorporado a la ciudad de Burgos a mediados del siglo XX, es su iglesia parroquial de Santa María la Real y Antigua. Este recio y sobrio templo se construyó en un elegante estilo gótico en el siglo XIV, y apenas ha recibido añadidos desde entonces.

Nuestra Señora la Real y Antigua contó con muchos devotos entre la oligarquía burgalesa, entre ellos miembros del linaje de los Pérez Giralte, cuyas armas campean en las puertas de entrada al templo, labradas en un estética puramente mudéjar a principios del siglo XV. Las hojas del postigo se cubren con estrellas de lacería de a ocho, decoradas con elementos vegetales y zoológicos e incluso figuras de guerreros.
Esta magnífica puerta no es singular en la zona burgalesa, pues sin salir de la ciudad encontramos otras tan interesantes como la del Arco de Santa María (hoy en el Museo de Burgos) o la que comunica la iglesia con el claustro en el Monasterio de las Huelgas.

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~ Pórtico

Es un añadido a los pies del templo, pero integrado plenamente con la obra y concebido, posiblemente, como humilladero, que a la vez, protege la bella portada de las inclemencias del tiempo.

Tiene tres arcos escarzanos sosteniendo espesos muros de piedra, que se elevan hasta el segundo tramo de la torre, destacando también los contrafuertes.
Bajo el arco de entrada actualmente hay un monumento de piedra de Hontoria, del siglo XVI, que expone en su hornacina aconchada, una imagen de piedra, enrejada, de la Virgen y el Niño; ambas figuras están coronadas; la de María tiene una manzana en la mano derecha, y la del Niño, que está sentado sobre el regazo de su Madre, lleva en su mano la bola del mundo. Es una obra moderna; su autor es Fortunato Sotillo, natural de Gumiel de Izán, y con taller en burgos, fallecido en los años 80 del siglo XX.

Otros elementos importantes del pórtico son la bóveda de plementaería octopartita, con nervios cruceros más ligaduras longitudinal y transversal, que posee una interesante clave, y el pavimento, que es de estrellas con cantos y huesos; el pavimento ha sido restaurado por las manos expertas de Casimiro Paz.
En el pórtico todavía quedan las ménsulas en las que hasta 1996 se apoyaban las imágenes del Calvario gótico, colocado actualmente en el presbiterio.

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~ El Crucero

Parece que en nuestra península los cruceros no tienen una existencia anterior al siglo XIII, los más antiguos conservados son de finales de la Edad Media. Tienen una constante: disponene en su parte superior una cruz, símbolo esencial de la religión cristiana. por lo general, se levantan sobre circulares decrecientes, y su estilo depende de la época de su realización.

Nuestro crucero, situado actualmente casi frente a la iglesia, anteriormente estuvo en el cementerio del antiguo pueblo, ubicado al sur de la misma, aunque antes había estado en un término del pueblo, llamado "Camino Casa la Vega", cerca de su actual emplazamiento, sirviendo de hito para el viajero del Camino de Santiago.
A veces los cruceros se protegen mediante un templete que recibe el nombre de humilladero, tomado de la propia denominación que se suele dar a la misma cruz de piedra, pero el nuestra nunca lo tuvo, aunque en estos momentos falta alguna pieza de su base.
Uno de los pocos cruceros conservados en el entorno de burgos del siglo XV es especialmente éste. Labrado en piedra de hontoria, consta de dos partes. En la inferior, a modo de astil, aparecen dos ángeles tenantes de medio cuerpo, el uno con la leyenda "ave maris stella", y el otro con cartela. Hay también pequeños escudos correspondientes a los Cartajena, familia distinguida en Burgos, donde dos de sus miembros fueron célebres obispos.

También, en el fuste encontramos labradas en relieve las figuras de jesucristo atado a la columna, de San Andrés con su cruz aspada, de San Pedro con sus llaves, y de Santiago en traje de peregrino; todas con su nombre en latín.
En el amberso de la cruz está el crucificado, y en el reverso, la Virgen con el niño en sus brazos, coronada, indicando al peregrino la cercanía de un santuario mariano importante.
Hay también varias leyendas, entre las que se puede leer la frase del salmo 116: "laudate dominum omnes gentes".

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Interior

~ Presbiterio

Es una de las partes más destacables del templo; tuvo que ser reestructurado a raíz del concilio Vaticano II para adaptarlo, en lo posible, a las nuevas normas litúrgicas.

Su bóveda octopartita, enmarcada dentro de un ábside cuadrado - como quedó escrito anteriormente- le confiere dignidad aristocrática; y sus nervios, como finísimos juncos, parten de la base con bellos capiteles (su color procede del siglo XVIII), de temática vegetal.
Hay una excepción al tema vegeal: existe un capitel en el presbiterio con figura animada: un león mordiendo un hueso; este capitel rompe la tradición cisterciense que impuso San Bernardo y se vuelve a los motivos románicos.
En la clave de esta bóveda se representa en alto relieve la coronación de Nuestra Señora en forma muy semejante a la del tímpano de la entrada, aunque en este caso, la Virgen está rodeada de angelitos ceriferarios y turiferarios.

~ Resto de la nave

El crucero tiene cuatro robustos pilares, de donde parten los arcos triunfal y toral de la nave mayor y los dos arcos ojivos de paso a las capillas, lo mismo que los diagonales de la bóveda central; los formeros arrancan de ménsulas, que simulan ángeles de medio cuerpo sobre nubes, teniendo dos de ellos coronas en sus manos en una nueva alusión a la coronación a la Virgen, y un tercero, un libro.

El cuarto presenta la figura burlesca de un pato con cabeza humana encapuchada.
En el resto de la nave, los pilares están compuestos por columnas cilíndricas y las bóvedas respectivas tienen forma sexpartita, excepto las de las capillas laterales, que son de crucería simple. Es interesante destacar que en el florón de la clave del crucero se reprsenta a la Santísima Virgen imponiendo la casulla a San Ildefonso. Es de destacar su adorno circular, que muestra el escudo del noble benefactor.
En el florón de la clave de la capilla lateral izquierda se muestra a un obispo y una infanta, sosteniendo entre ambos una iglesia, lo que hace alusión, sin duda, a la donación que las infantas Dª Urraca y Dª Elvira hicieron a nuestro obispo Don Simón en el año 1074.

Y en la arandela de la capilla lateral derecha la representación se la lleva San Antonio Abad, devoción unida a los orígenes de la iglesia, donde existe también una cofradía antiquísima que lleva su nombre.
En los restantes florones se hallan dos escudos, que parecen corresponder a Don Juan de Puche y a Don Juan de Giralte el mozo, ambos de origen catalán, quienes costearían esta parte de la iglesia, realizada ya en el siglo XV.
La puerta de madera del templo está blasonada, igual que éstas bóvedas.

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~ Vidrieras

Estas vidrieras están ubicadas en los dos ventanales del muro central de ábside. Están dotadas de practicables ventilación de la iglesia. Y dotan las vidrieras de estos dos ventanales, en sus cenefas, de unos símbolos muy significativos al lugar donde se colocan: la Concha de Peregrino, y la Tau de San Antón.

Con la Concha de Peregrino expresan, por una parte los doce siglos de paso constante de los jacobitas en marcha hacia Santiago y, a la vez, el hecho de que la iglesia sigue siendo hoy peregrina de la fe. Y con la Tau de San Antón, signo estilizado de su báculo, expresan la ligazón de esta Comunidad Parroquial a la memoria de este santo, impulsora de grandes obras de caridad cristiana a través de su centenaria cofradía.
Estas vidrieras representan la Anunciación del Ángel a María (en el lado izquierdo), y la Presentación del Niño Jesús en el Templo, en brazos de María y ante la mirada atenta de los ancianos Simeón y Ana; en el óculo de la izquierda se ve el símbolo del Espíritu Santo interviniendo en la Encarnación del hijo de Dios, y en el de la derecha, la ofrenda de dos pichones, según la narración evangélica de San Lucas.

En la base de estas vidrieras se hallan cuatro escudos, representando, de izquierda a derecha, a Castilla, a Santa María la Real y Antigua, al Arzobispo y a León.
Los cuatro escudos están inteligentemente escogidos: los de los extremos hacen alusión a la tierra en la que estamos: Castilla y León; el del jarrón con azucenas simboliza a la Virgen, a quien está dedicado el templo y cuya veneración está dedicado el primitivo pueblo; y el del Arzobispo hace alusión a que esta iglesia fue sede episcopal durante algún tiempo, hecho que desde siempre ha llenado de legítimo orgullo a su Comunidad Parroquial, sirviendo actualmente para reforzar los lazos con la Iglesia Diocesana.

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~ Nuestra Señora de Gamonal

Es una talla voluminosa, sedente, con el Niño en su brazo izquierdo. Está policromada, y su estofado es bueno. Está fechada en el siglo XVII.

~ Retablo de San Antón

Fechado en el año 1681, el estilo de este retablo está a medio camino entre el clasicismo de la primera mitad del siglo XVII y el mundo estético prechurrigueresco. Está formado por la predela y dos cuerpos más; en ésta destacan, de izquierda a derecha, cuatro tablas de pintura corriente en las que aparecen representados los cuatro grandes fundadores de órdenes religiosas: San Ignacio de Loyola(Compañía de Jesús), San Francisco de Asís (Franciscanos), Santo Domingo de Guzmán (Dominicos) y Santa Teresa de Jesús (reformadora de las Carmelitas).

Además de estas pinturas, en la predela se encuentran también dos relicarios de huesos, protegidos con rejas, que contienen restos minúsculos.
En la parte central, con cuatro columnas estriadas, que sustentan un entablamento y que dividen las tres calles del retablo, encontramos cuatro hornacinas, además de la principal, que es como un gran nicho de coronación semicircular; en esta última hallamos la imagen de San Antonio Abad, de gran devoción en la parroquia, cuya fiesta, el 17 de Enero, se celebra con gran solemnidad. Es una imagen trabajada con hábito, con policromía simple, que mide 1,29 m. de altura; tiene dos signos identificativos: el báculo -que no parece ser el original- y un libro. Y en las restantes hornacinas, de izquierda a derecha y de arriba a abajo, están las imágenes de San Sebastián, San Jerónimo, San Antonio de Padua y San Lesmes, todas ellas de menores proporciones que la central (sobre 62 cm de altura).

En la parte superior del retablo, el centro lo ocupa un cuadro en relieve, representando a San Martín que, montado en el caballo, está partiendo con la espada su capa para entregársela al mendigo. A los lados hay dos imágenes, una de ellas de rodillas y en actitud orante, la otra, de pie; no pertenecen al retablo y se ignora su procedencia. En el remate, además de una pequeña pintura de la Dolorosa, se encuentra una sencilla criz, sin Cristo.

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~ Calvario del Presbiterio

Imagen de Cristo crucificado, la Virgen y San Juan. Las tres figuras están ejecutadas en materiales diferentes: el Santo Cristo con la cruz, en madera de pino; las de la Virgen y San Juan, en madera de nogal. Las tres van vaciadas por el reverso, que se cubre con una pieza plana de madera de pino. Las caracteristicas de este Calvario nos llevan a situar su fecha de ejecución entre el 1300 y el 1335, época de esplendor de la iglesia, que por esas fechas estaría en plena construcción. A finales del siglo XVII, o principios del XVIII, se les añade a la Virgen y a San Juan unas breves coronas a modo de disco de madera maciza.

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~ Imagen de Santa María la Real y Antigua

Se encuentra colocada sobre un moderno capitel, imitación de los existentes en el templo, en el muro central del presbiterio, rodeada de hojas de plata, que le sirven de adorno y realce. Lleva al Niño sentado en el lado izquierdo y con la bola del mundo en su mano izquierda; en la mano derecha muestra la manzana (alusión al pecado original y la Redención); seguramente, esta imagen es imitación de la primitiva, que al tiempo se encargó de destruir. Orece todos los caracteres de las Vírgenes sedentes del siglo XIV, haciendo sido embellecida a mediados del s.XX. Es la imagen patronal que el día de su fiesta, 2 de Febrero, recorre el barrio a hombros de cofrades y jóvenes, y arropada por la oración y la veneración de muchísimos devotos.

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~ Grupo de la Anunciación

Formado por las bellísimas imágenes de la Virgen y el Arcángel San Gabriel. Actualmente están colocadas en uno de los muros de la capilla de San Antón; se cree que estas dos imágenes formaron parte de un conjunto más amplio situado en sus tiempos en el retablo del altar mayor, no en el último que había, sino en otro anterior. En el gótico es una de las represntaciones más repetidas y su vigencia será constante en la época renacentistas y barroca.

Ambas imágenes se hallan de pie; la de la Virgen tiene cubierta su cabeza con un velo, aunque deja ver algo su cabello, mientras que la del Ángel lleva el cabello suelto y con ondulaciones que se deslizan suavemente sobre sus hombros. Ambas llevan túnicas de escote redondo y con mangas anchas, que permiten ver otra interior ajustada.
Las dos también tienen manto, aunque el de la Virgen le cruza por debajo del brazo derecho, mientras que el del ángel cae verticalmente sobre el hombro derecho y por delante del izquierdo.
Los pies de la imagen de la Virgen se descubren calzados, mientras que el derecho del Ángel se le ve descalzo.
Los rostros de las dos imágenes -con disposición frontal, aunque girando suavemente las cabezas- son bellísimos, con una expresión en el de la Virgen de humildad y de aceptación, y en el del Ángel, con una mirada dulce y fija y en actitud de comunicación y diálogo, que se ve apoyado por el gesto de las manos.

Ciertamente, el artista ha conseguido plasmar con fidelidad y belleza el momento trascendente del Anuncio del Ángel a Maria: momento en el que su "sí" desencadena la Redención de la Humanidad.

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~ Cuadro del Descendimiento

Está formado por un grupo de cinco imágenes en madera policromada, en el que destacan de manera especial la expresividad de María y la del propio Cristo, de ojos cerrados y boca abierta.

Los ojos de María están fijos en el rostro de su hijo, a quien tiene en su regazo; también San Juan tiene expresión de dolor y está en actitud de ayudar a María para que no se le caiga el cuerpo yerto de su Hijo Jesús. Junto a la cruz, y en un tercer plano, se encuentran las figuras de José de Arimatea y Nicodemo, cuya expresividad está en armonía con la escena en la que participan. Tanto San Juan, como José de Arimatea y Nicodemo, miran de frente, como queriéndonos decir: "¿qué hemos hecho con Jesús?".
Desde la contemplación de este grupo escultórico, por el que esta capilla recibe el nombre de Nuestra Señora de la Piedad, entendemos mejor las palabras del discípulo amado: "Vino a los suyos, y los suyos no le recibieron" (Jn 1,11).

Situamos esta obra en el siglo XVI, de autor anónimo, y factura de escuela castellana. Seguramente estuvo colocada en el retablo que había en esta capilla.

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~ Cuadros sobre la vida de San Antonio Abad

Colocados actualmente en la pared interior izquierda de la nave central de la iglesia, estas cinco tablas fueron pintadas para un retablo que, en sus tiempos, seguramente estuvo en la capilla lateral derecha, llamada de San Antón.

Las medidas de los cinco cuadros son similares; están entre 50cm y 60cm.
Han sido atribuidos al autor cuyo sobrenombre es el Maestro de Gamonal; es el mismo que el pintor de los cuadros del retablo de Santa Ana, actualmente en el Museo Diocesano de Valladolid.
Su estilo delata la gran fuerza de la remanente influencia del manierismo flamenco, sobre todo en los pliegues de las vestiduras; además tiene una ligera idealización italiana de los rostros que, juntamente con las arquitecturas pintadas, refleja los balbuceos del Renacimiento.

Estas pinturas datan de final del siglo XV, o comienzos del siglo XVI, en un estilo transición gótico-renacentista.

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~ Imagen de la Virgen con el Niño

Esta imagen está guardada al culto, por lo que está situada en dependencias anejas al templo, aunque en sus tiempos fue imagen procesional.
es una talla policromada y con estofado, de cabello largo y con el Niño Jesús desnudo en sus brazos, y en actitud juguetona.
Tiene un aplio manto con muchos dobles, que recoge en su brazo derecho.
Situamos esta imagen en el siglo XVI.

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~ Cruz Parroquial

Podemos calificar la cruz parroquial como la gran joya de esta iglesia, respecto de sus alhajas. Es una cruz que "destaca, entre todas las de la Diócesis, por su magnífica y abundante iconografía y por la belleza de sus formas artísticas".
Es con toda probabilidad, del siglo XV; de plata sobredorada y de medidas 92,5cm x 68cm.

Las medidas de los cinco cuadros son similares; están entre 50cm y 60cm.
Cruz latina con salientes semicirculares y terminación flordeliseada, cuyos brazos rectos están decorados con motivos vegetales naturalistas.
En el anverso, todo gira en torno a Cristo crucificado, con túnica cubriendo su cuerpo y con las manos en actitud orante.
el crucificado está rodeado de placas en forma de rombo, esmaltadas en su tiempos, grabadas con escenas que combinan el Nacimiento de Jesús y su Pasión; de esta forma, en el rombo del palo horizontal izquierdo está la representación del anuncio del Nacimiento del Salvador por parte del lángel a los pastores; en este cuadro, aunque casi de manera imperceptible, se pueden leer las palabras "Gloria in" y, además de la figura alada del ángel, el artista ha grabado tres pastores y cuatro ovejas.
El rombo colocado a los pies de Jesucristo, y tapado en gran parte por la figura de Adán, representa la Adoración de los Magos: una estrella sitúa rápidamente la escena evangélica. A los pies del símbolo del Espíritu Santo la grabación corresponde a la escena de la pasión, cuando Cristo es atado a la columna y azotado. Y a la derecha, la grabación del rombo representa a Jesús cargado con la cruz, camino del Calvario, y ayudado por el Cirineo.

Toda la cruz está rodeada de fina crestería, de ganchos y, además, tiene rayos en los ángulos del cuadrón (siglo XVIII) y pináculos adornados con tornapuntas en los extremos de los brazos.
La maza en la que se encaja la cruz se compone de astil en forma de columna, decorada con grabados de cueros recortados, espejos, botones, y otros elementos característicos del siglo XVI, que desemboca en un reborde ancho adornado por seis querubines repujados y frutas. En la base del templete se adorna con varios relieves que representan a la Anunciación del Ángel, San Antón, la imposición de la casulla por parte de la Virgen a San Ildefonso, San Buenaventura, la Coronación de la Virgen y San Antonio de Padua; también destacan seis bustos de sirenas.
En el mismo templete, que tiene forma circular y está dividido en seis espacios por columnas de tipo dórico, de dos a dos, se encuentran en hornacinas aconchadas seis apóstoles, funddidos y dorados, caracterizados con sus atributos genéricos (la túnica, el manto y el libro) y personales: San Pedro con las llaves, San Bartolomé con la daga, San Juan con el cáliz, San Andrés con la cruz en forma de aspa, San Felipe con el báculo terminado en cruz y Santo Tomás con la lanza. Remata en cubierta a modo de cúpula, con caja de anclaje para la cruz.
Es del siglo XVI (entre 1588 y 1595), sus medidas son de 53,5cm por 26,5cm y es obra de Lesmes Ruiz de Bivar.

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~ Cáliz

Bonito cáliz en plata sobredorada. No tiene ninguna marca identificativa. De base circular, sobre ella hay dos molduras, convexas la inferior y la superior. el astil es torneado y se apoya en un gollete campaniforme. El nudo tiene forma de ánfora con dos filetes o anillos en la parte superior.

El cuello cuello es moldurado y sirve de pase a una lisa copa, de labio abierto y decorada con un filete o arandela en el tercio inferior.
Fechamos su ejecución en la segunda mitad del siglo XVIII, concretamente en el año 1797, ya que en las cuentas de ese año, se lee una partida que dice: "Item. Mil ciento cincuenta y tres reales y nueve mrs. pues aunque son 1512, se rebajan 358 reales y 25mrs. valor de un cáliz viejo, importe de un cáliz nuevo de plata y su patena de lo mismo, todo dorado a fuego, de peso de 37 onzas, en que entra la construcción y el dorado".
Como este cáliz pesa 645 gramos, pensamos que se refiere a él que, con su patena, pesaría las 37 onzas.

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~ Vinajeras

Grupo formado por dos recipientes y un plato hondo con enganche para los mismos, los cuales tienen artístico agarradero y tapa, señalada con la letra respectiva: "v", para el vino; "a", para el agua.
Su base es circular y encaja el gollete para sostener el recipiente. Los grabados son vegetales (hojas y flores).
La bandeja también está adornada con grabados vegetales repujados.
Estas vinajeras datan del año 1799.

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